La contaminación del aire es uno de los principales problemas medioambientales en la actualidad. Centenares de millones de personas en todo el mundo respiran aire de mala calidad en las grandes ciudades donde viven confinados, lo que se está convirtiendo en un problema de salud de primer orden. Cada vez hay más estudios científicos que relacionan las altas concentraciones de gases contaminantes y de partículas microscópicas (PM) en la atmósfera con las tasas de incidencia de determinadas patologías y enfermedades.
Madrid es una de las capitales europeas en las que cada cierto tiempo se disparan los niveles de contaminantes en el aire, con el riesgo que ello supone para la ciudadanía. Por tal motivo, el Ayuntamiento de Madrid lleva tiempo buscando soluciones para tratar de atajar este problema, en particular los peligrosos picos de óxidos de nitrógeno (NOx), cuya principal fuente de emisión es el tráfico, principalmente los vehículos diésel.
Boina de contaminación de la ciudad de Madrid. Se favorece su formación principalmente durante los episodios de inversión térmica que tienen lugar en invierno.
No existe una única “solución mágica” que termine en poco tiempo con la contaminación atmosférica de las grandes ciudades. Ha de ser la suma de distintas acciones –todas ellas en la misma dirección– la que vaya logrando resultados parciales satisfactorios. Al margen de ir reduciendo la cantidad de vehículos que acceden al centro de la ciudad, la renovación del parque automovilístico –disminuyendo de forma progresiva los coches más contaminantes, en favor de los híbridos y eléctricos– y la progresiva peatonalización de la vía pública y el urbanismo sostenible, se requieren medidas más urgentes que frenen las situaciones de alto riesgo para la población, por exposición a elevadas concentraciones de gases contaminantes y particulado.
En su búsqueda de soluciones, el Ayuntamiento de Madrid ha apostado por la innovación, para lo cual convocó un concurso público para llevar a cabo una E&D (Exaptación & Diversidad). Esta original metodología, que estimula el pensamiento creativo, está aún poco introducida en España. Se basa en la interconexión de conocimientos de un equipo interdisciplinar formado por especialistas en diferentes materias, lo que permite generar resultados y nuevos conocimientos que pueden ayudar a solucionar un determinado problema, como el de la citada contaminación atmosférica.
Quien suscribe estas líneas –en calidad de divulgador científico y consultor de la Organización Meteorológica Mundial– formó parte de ese grupo de trabajo, entre cuyos catorce miembros encontramos especialistas en nanomateriales, microbiología, ecología, geología, meteorología, ingeniería química y medioambiental, biología molecular y sistemas complejos. Tras una primera fase, de varios meses de duración, en la que se produjo un intercambio fluido de correos electrónicos entre muchos de nosotros, aportando entre todos una primera nube de ideas, tuvieron lugar las reuniones de trabajo, celebradas entre los días 29 y 31 de mayo de 2017 en el espacio cultural La N@ve, del Ayuntamiento de Madrid.
Fotografía del grupo de trabajo de la E&D junto al edificio de La N@ve, en Villaverde (Madrid), lugar donde tuvieron lugar las reuniones de trabajo.
El resultado de ese trabajo de Ingeniería del Conocimiento ha sido muy enriquecedor para cada uno de los que formamos parte del grupo, amén de las ideas innovadoras que han emergido de esas provechosas reuniones, y que los que hemos contribuido a ellas pensamos que funcionarían; que podrían llevarse a la práctica. Han salido ideas para mejorar las actuales herramientas predictivas sobre contaminación atmosférica, también las ha habido para la retirada de las PM y para la eliminación y reducción de óxidos de nitrógeno. Ese conjunto de ideas de la E&D, debidamente ordenadas y explicadas, forman parte de un Informe que ahora tendrá que valorar una comisión técnica del Ayuntamiento de Madrid.
Al final es la voluntad política la que dará o no luz verde a alguna de nuestras ideas u otras que puedan surgir en el futuro. Ya es un hecho positivo que el Ayuntamiento de Madrid haya promovido una E&D como fórmula para buscar ideas innovadoras al problema de la contaminación urbana. El siguiente paso es la apuesta decidida por alguna de esas ideas, como posible solución a uno de los principales problemas que tiene la ciudad. La temida boina de contaminación es el enemigo a batir.
Grupo de trabajo de la E&D frente la puerta principal del edificio de Cibeles, donde se ubica el Ayuntamiento de Madrid.
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